sábado, 15 de noviembre de 2008

Ondina

Desde las estentóreas aguas del Eúfrates
abigarrado por los fríos nubarrones del norte
con el verde prado cubierto por densa niebla
ataviado por las irisadas flores con visos multicolores.
Ahí fue tu nacimiento
Oh gran diosa del estío.

Superior a las míticas reinas élficas
así es tu belleza. Oh graciosa ninfa!
Tu figura se acuna sobre el mundo
como la hoja del fresno lo hace sobre el estanque.

Tu aprisionado y negro cabello que como frío fleco
se escapa cayendo sobre tu frente
no se compara a la inmensidad y beldad de la endrina libertad
de dejarlo caer sobre tus desnudos y blancos hombros
cual ninfa nocturna.
Piel y dientes de mármol, labios de sangre, nariz de diosa,
ojos verdes como la vida misma, con sus centros rutilantes
que destilan vida, luz y belleza, a la vez que miran.
Vida, semidiosa, la campiña misma podría inútilmente tratar de imitar
tu aroma angelical,
hueles a flor, hueles a agua, hueles a ebriedad, a locura, a pasión, hueles a mujer!

Mas porqué incautos mis ojos te tuvieron que mirar?
Ya que de tu figura no me puedo escapar
porque mi cuerpo y virilidad entera anhelan tu cuerpo tocar
y un evo me bastaría para desnudarte al mirarte y en el
vaivén de tu cadera perderme,
de la sutileza de tu cintura prenderme
y de la frescura de tus muslos emborracharme,
todo hasta extasiarme
en tu aroma prohibido, en tu aroma de mujer.
¿Porqué a un imposible me tuve que aprender?

Oh alba mía, fanal de vida que la flor envidia
diosa madre y madre diosa,
sólo quitándote el don de diosa te divinizas,
sólo humanizándote te sacramentas.
Mujer tierno fruto, de este mundo encomiado,
sólo al hombre se le fue entregado.
Mujer, eres la tierra humana, recibes la semilla, la guardas en tu interior,
le das de ti, germina y por ti llega la vida.
Eres complemento incompleto para imperfecto incompleto.

Porque eres la más grande evidencia de Dios,
nadie al ver tus ojos deslumbrantes puede afirmar
que fuiste obra de casualidad aberrante,
ya que nadie fue sino Dios el creante
y el primero en desnudarte.

1 comentario:

Jediael dijo...

Creanlo o no (yo tampoco lo creo)este "poema" lo escribí en 3er semestre de prepa, osea que probablemente contaba con 17 años de edad o menos.
Aunque en un principio estaba dedicada obviamente a una mujer en especial después se volvió una apología de la mujer.
Espero sus comentarios. Saludos!!!