Buenas noticias

Normandía 19 de Julio de 1944

Buenas noticias Di!

Si bien la última vez que nos despedimos y mi piel disfrutó de la fresca blancura de la tuya los climas eran aciagos e inciertos ahora veo todo diferente. Antes platicábamos de lo terrible que era voltear y darnos cuenta de que los buenos. . .tal vez no son tan buenos como debieran(mos) ser. Tal parece que nuestras percepciones pueden permitirse cambiar. 

Antes nos desesperanzábamos de nuestros líderes, de nuestros superiores y más aún de nuestros compatriotas! Si nosotros somos los buenos (decíamos) qué será de este mundo cada vez en mayor decadencia?

Ciertamente nuestros destinos se ensombrecían por gruesas nubes de incertidumbre y desconfianza. Pero hoy, en estos días; la esperanza del cambio atraviesa los cielos y se aloja en nuestros corazones. A pesar de que aquí desde hace ya varios días llueve y truena casi todos los días. 

Pero Di! Amada Di! Las cosas han cambiado y cambiarán más! 

Considero mi deber informarte, pues como bien te comenté en aquella carta, si decidi enlistarme y más asumir el cargo que tengo fue con el firme propósito de hacer algo por mi país, por mi bandera; de no sólo pensar y discutir sino actuar, intentar hacer algo. Y cuando recibí la distinción dije "sí" porque podré hacer aún más por mi país. Di, está sucediendo Di, está sucediendo. . .

He conocido jóvenes reclutas que están marcando la diferencia. Desde las trincheras, pero también desde sus mentes y sus corazones. Sí yo sé que bien podrías pensar lo que todo mundo. Al ver y escucharlos en las tiendas de campaña podrías pensar "y a estos les corresponde tomar los territorios ocupados y salvar al mundo del mal?"

Pero cuándo los ves en el campo de batalla, cuando los ves aventarse del avión por primera vez, tirados sobre el fango bajo la lluvia inmóviles por casi 4 horas, no dejando atrás a ningún compañero herido y aprendiendo a sonreír a pesar del dolor y la nostalgia puedes creer que efectivamente en ellos está la salvación no sólo de nuestro país sino del mundo. Ellos están revolucionando nuestro "glorioso" ejeército para que sea glorioso, asi, sin comillas. 

Su sentir, su pensar y sobretodo su actuar está cambiando. Y sabes qué es lo mejor de todo? Que este cambio se está dando de abajo hacia arriba, de los mandos inferiores a los mandos medios y hasta arriba va a llegar. Quieran o no quieran nuestros líderes máximos deberán reconocer esta llama incipiente de cambio positivo, es irónico que estamos cambiando para volver a aquello que nunca debe de cambiar. A reconocer que más allá de nuestras diferencias y pensamientos está nuestro amor a la patria; a entender que ha sido tanto el tiempo perdido en pelearnos entre nosotros cuando allá afuera un enemigo gana terreno. Es glorioso preciosa Di! Tal parece que lo estamos entendiendo justo a tiempo para preparar una de las últimas operaciones que pondrá fin a este régimen de maldad.

Te extraño Di. Anhelo ya no solo todo lo que tú representas y lo que vivimos juntos en casa sino simplemente tu presencia. Añoro tan sólo el verte, aunque tú no me veas. El saber que estás viva y estás bien me da fuerzas y me motiva para salir cada día a la lluvia francesa y avanzar millas con mis hombres. Pero he de ejercitar mi fe pues aunque los días con tu ausencia se apelmazan sobre mi húmedo corazón no son suficientes (ni lo serán) para que olvide yo tan siquiera uno de tus brillantes cabellos princesa de mi corazón. Como te lo he dicho y te lo digo cada noche en pensamiento. No me olvido de ti y mis oraciones las encamino siempre para que tú estés bien. No tengo opción otra mas que la de encomendar tu alma al cielo y esperar que muy pronto, cuando se acabe todo esto te veré. Mientras te digo guardando las mermeladas francesas que me pediste. Las tengo bien escondidas en mi mochila. Sé que pronto podré dártelas.

Termino expresando mi deseo de que ángeles guardianes vestidos de blanco con espadas multicolores guarden tu sueño, tu entrada y tu salida y vayan contigo siempre así como el mismo Dios en el que creemos guarde de nuestros padres y de nuestras hermanas. Si te es posible ruega por tu más ferviente admirador, ruega por que tenga la entereza y valentía de estar a la altura de las circunstancias que éstos jóvenes merecen. Gracias por todo. Te amo.

Tuyo: 

SS XXX