martes, 29 de octubre de 2013

La última décima (IV)



IV

Ven amada:
Hagamos en lo oscuro nuestra morada,
cierra la puerta, atranca la ventana,
evitemos que nuestro amor se salga;
que entre sangre, rayos y destrozos;
entre guerras, victorias y abrojos
es tu cariño la bandera
que en mi corazón persevera,
es nuestro amor la barrera
que deja el odio afuera,
es tu amor mi motivo secreto,
combustible eterno y perfecto.

Y todo es para ti, todo a ti te entrego,
todo es para darte un futuro nuevo
para que al esperarlo, confiada sonrías
e ilumines mis días
Es para darte un cielo más brillante
y que de día pueda dibujarte
y bajo la luna acariciarte.
Es para hacer el aire más sincero
y sientas con el viento de mis dedos
como acaricio tus nobles cabellos.
Es para darte un futuro nuevo y radiante
para que tengas una esperanza muy grande
y esa esperanza sea tan grande
que en ella pueda yo acompañarte

Pero ponto tendremos que correr, padecer, separarnos, alejarnos, volar, llorar...

Búscame entre las estrellas legendarias
mándame besos y plegarias
capaces de atravesar la negrura
y de llegar hasta mi terrible altura.
Y aunque más allá del cielo deba partir
sé que aquí brilla el sol de mi existir,
que tu sonrisa es la ardiente estrella
que ilumina mi vida entera

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