He leído en varios sitios que a este día se le ha denominado también, en un tono sarcástico, como el día de la mercadotecnia.
Quiero aprovechar la ocasión para expresar mi total acuerdo con esta afirmación.
Antes que nada se me hace imprescindible definir el termino "mercadotecnia" y en esta ocasión he de esgrimir una definición que no inventé yo pero que sí he hecho muy mía, la cual define a la mercadotecnia como el simple hecho de "satisfacer necesidades".
Ahora bien si partimos desde este punto el declarar que el 14 de febrero osease el día del amor y la amistad es igual al día de la mercadotecnia podríamos decir que es el día de satisfacer necesidades.
Sé que muchos han de estar protestando pensando que cuando se refiere al 14 de febrero como "el día de la mercadotecnia" se hace con el afan de criticar el hecho de que un día en especial los vendedores de flores, chocolates y regalos cursis hagan su agosto vendiendo cosas en una forma que no se repetirá hasta dentro de un año. Otros de seguro piensan que el 14 de febrero como actualmente lo conocemos surgió de la maquiavélica mente de personas que se les ocurrió darle un significado especial a esta fecha para poder aumentar la demanda y por ende el consumo exacerbado de detalles románticos con el fin de obtener grandes ganancias. He de decir que estoy totalmente de acuerdo con ambas ideas.
Sin embargo ante una idea preconcebida maquiavélicamente hemos de reaccionar de la misma y maquiavélica forma; es decir aprobar que el fin justifica los medios.
Porqué digo esto? Porque bueno, sea con el propósito que haya sido el original, ahora todos los occcidentales y (algunos asiáticos) tenemos un pretexto para hacer cosas que no haríamos sin las circunstancias que se suscitan precisamente en esta fecha. Es decir, podemos darnos el lujo de regalar cosas, de hacer cosas y hasta de recibir cosas.
Qué otro día podemos ver tanta gente feliz? Qué otro día se ven multitiudes de globos por la ciudad, petalos de rosa tirados en la calle, coches llenos de post its, caras de hombres nerviosos y rostros de mujeres emocionadas? Qué otro día nos provee de una excusa tan apropiada para hacer lo que no haríamos otro día? Será que la mercadotecnia nos enagaña y nos hace creer cosas que no son del todo cierto o simplemente responde a la necesidad que tenemos como seres humanos de expresar los más dulces sentimientos hacia nuestros semejantes?
Creo que va por ahí, este día satisface nuestra necesidad de hacer el ridículo, atrevernos a decir o hacer lo que siempre hemos querido y a pasar un día feliz en un año que cada vez permite menos días como estos.
Es por eso que agradezco a quienes con ninguna intención dan merito a la mercadotecnia por los momentos agradavles inherentes al siempre anhelado y recordado día del amor y la amistad.
Quiero aprovechar la ocasión para expresar mi total acuerdo con esta afirmación.
Antes que nada se me hace imprescindible definir el termino "mercadotecnia" y en esta ocasión he de esgrimir una definición que no inventé yo pero que sí he hecho muy mía, la cual define a la mercadotecnia como el simple hecho de "satisfacer necesidades".
Ahora bien si partimos desde este punto el declarar que el 14 de febrero osease el día del amor y la amistad es igual al día de la mercadotecnia podríamos decir que es el día de satisfacer necesidades.
Sé que muchos han de estar protestando pensando que cuando se refiere al 14 de febrero como "el día de la mercadotecnia" se hace con el afan de criticar el hecho de que un día en especial los vendedores de flores, chocolates y regalos cursis hagan su agosto vendiendo cosas en una forma que no se repetirá hasta dentro de un año. Otros de seguro piensan que el 14 de febrero como actualmente lo conocemos surgió de la maquiavélica mente de personas que se les ocurrió darle un significado especial a esta fecha para poder aumentar la demanda y por ende el consumo exacerbado de detalles románticos con el fin de obtener grandes ganancias. He de decir que estoy totalmente de acuerdo con ambas ideas.
Sin embargo ante una idea preconcebida maquiavélicamente hemos de reaccionar de la misma y maquiavélica forma; es decir aprobar que el fin justifica los medios.
Porqué digo esto? Porque bueno, sea con el propósito que haya sido el original, ahora todos los occcidentales y (algunos asiáticos) tenemos un pretexto para hacer cosas que no haríamos sin las circunstancias que se suscitan precisamente en esta fecha. Es decir, podemos darnos el lujo de regalar cosas, de hacer cosas y hasta de recibir cosas.
Qué otro día podemos ver tanta gente feliz? Qué otro día se ven multitiudes de globos por la ciudad, petalos de rosa tirados en la calle, coches llenos de post its, caras de hombres nerviosos y rostros de mujeres emocionadas? Qué otro día nos provee de una excusa tan apropiada para hacer lo que no haríamos otro día? Será que la mercadotecnia nos enagaña y nos hace creer cosas que no son del todo cierto o simplemente responde a la necesidad que tenemos como seres humanos de expresar los más dulces sentimientos hacia nuestros semejantes?
Creo que va por ahí, este día satisface nuestra necesidad de hacer el ridículo, atrevernos a decir o hacer lo que siempre hemos querido y a pasar un día feliz en un año que cada vez permite menos días como estos.
Es por eso que agradezco a quienes con ninguna intención dan merito a la mercadotecnia por los momentos agradavles inherentes al siempre anhelado y recordado día del amor y la amistad.
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